Ayer concluyó el período inicialmente programado para el desarrollo del Décimo Censo de Población y Vivienda con denuncias de personas que dicen les pegaron las etiquetas de “vivienda censada” sin haberlos entrevistado.
Ante las quejas, el director del Censo, Víctor Romero, explicó que los empadronadores pueden pegar la etiqueta a viviendas donde sus residentes se han negado a responder las preguntas, colocando las cualidades de la casa.
El funcionario de la Oficina Nacional de Estadísticas (ONE) indicó que las viviendas son contadas aunque los residentes no quieran dar la información, de manera que los empadronadores tienen la opción de marcar en la tableta que la persona rechazó y colocar la pegatina.
Sin embargo, a esta redacción llegaron testimonios de ciudadanos que, estando en casa, encontraron el sticker pegado en su puerta sin haber sido llamados por algún empadronador para el censo, o que cuando llegaron a casa del trabajo descubrieron que la vivienda estaba identificada como censada sin ellos haberse opuesto.
Recta final
Transcurrido los primeros 14 días del Censo, 25 provincias se preparan para el cierre formal del proceso, mientras siete están en pleno levantamiento. Una de ellas es El Seibo, que tuvo problemas en algunas localidades y está por debajo del nivel de avance del resto. Las demás demarcaciones rezagadas son Santo Domingo, el Distrito Nacional, Santiago, La Altagracia, Puerto Plata y San Cristóbal.
Fuente: Diario Libre