La protesta pacífica que convocó el Colegio Médico Dominicano (CMD) para ayer miércoles terminó en enfrentamiento con los policías que tenían la orden de no dejarlos pasar hasta el Palacio Nacional. El mal rato que pasaron los médicos, entre macanazos, empujones y gas pimienta, crispó los ánimos de los galenos, que convocaron hoy a una reunión para decidir una respuesta más contundente.
Senén Caba, presidente del CMD, llamó “a toda la membresía de la Junta Directiva, a todos los pasados presidentes y a las sociedades médicas especializadas” a un encuentro este jueves al mediodía para valorar la situación. “Que se prepare el presidente, que mañana le daremos la respuesta oportuna que él se merece”, advirtió el gremialista.
La mañana de ayer empezó con una noticia desalentadora para los médicos. El encuentro al que fueron convocados con la vicepresidenta Raquel Peña para escuchar sus demandas había sido suspendido. En su lugar, Peña fue al hospital Doctor Darío Contreras a inaugurar el techo que había sido reparado.
Los galenos marcharon como habían planeado desde la maternidad Nuestra Señora de La Altagracia con la intención de llegar hasta el Palacio Nacional, pero su paso fue impedido por la Policía Nacional una esquina antes.
"Que se prepare el presidente, que mañana le daremos la respuesta oportuna que él se merece"
Senén Caba
Presidente del CMD
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Los agentes cumplieron la orden de colocar las vallas metálicas para que la protesta de los médicos terminara en la calle Manuel de Jesús Galván, una cuadra antes de la Doctor Delgado, donde está el Palacio Nacional. Cuando vieron el obstáculo, los facultativos que lideraban la protesta, empezando por el propio presidente del CMD, intentaron empujar las vallas y pasar al otro lado.
La policía trataba de impedirlo y empujaba hacia atrás a todo el que quería pasar. En el forcejeo, se dieron macanazos, se roció gas picante, cayó gente al suelo y varias personas terminaron con rasguños.
El presidente del Colegio Médico calificaba de opresiva la actitud del Gobierno con ellos y amenazaba con llamar a un paro nacional inmediato si no se les permitía pasar. Luego de que una gran parte del personal de salud llegara hasta la esquina de la México con Doctor Delgado, la Policía permitió el paso de todos los manifestantes.
Algunos periodistas, fotógrafos y camarógrafos de medios de comunicación fueron agredidos, empujados y zarandeados. Un policía golpeó en la pierna a un fotógrafo con una especie de macana metálica.
Demandas
Los médicos insistieron en que esta vez no protestaban por aumento salarial.
En cambio, están en pie de lucha porque aseguran que el servicio de salud “está en colapso total” y en un descuido sin precedentes por parte de las autoridades.
Afirman que la infraestructura está muy deteriorada, que hasta tienen que bañar a los enfermos porque no tienen personal y que carecen de insumos para hacer su trabajo.
Exigen la apertura de 52 centros de salud en construcción, como el Padre Billini y el Luis Eduardo Aybar, al tiempo que rechazan una supuesta “intención privatizadora” del Gobierno, que presuntamente pretende poner esos y otros hospitales en manos de voluntariados en los que participan “oligarcas”.
Senén Caba denunció que las administradoras de riesgos de salud (ARS) incumplen con los acuerdos suscritos en agosto del año pasado y dice que esas empresas rehúyen reunirse con los médicos, pese a que habían programado un encuentro para marzo.
Otro maltrato que denuncian los médicos se refiere al otorgamiento de pensiones en las condiciones establecidas por ley. Afirman que no se les quiere reconocer las pensiones a personas enfermas.
Las clínicas también van
Los galenos amenazaron con protestas escalonadas y un paro nacional de hospitales y clínicas privadas. Rafael Mena, presidente de la Asociación Nacional de Clínicas Privadas, participó y apoyó la marcha, así como enfermeras, bioanalistas y laboratoristas. “Estamos contemplando la paralización no solamente en el sector público, también en el privado, posiblemente hasta simultánea”, señaló Caba.
Sigue el enfrentamiento
Tras el forcejeo esta mañana entre policías y médicos durante una marcha hacia el Palacio Nacional, el Gobierno informó, a través de un comunicado, que las puertas del Palacio Nacional están abiertas para el Colegio Médico Dominicano (CMD), y que no necesita realizar una manifestación para dialogar con las autoridades.
La posición gubernamental sobre el incidente de este miércoles la dio a conocer el vocero y director de Estrategia y Comunicación de la Presidencia, Homero Figueroa.
En el comunicado, las autoridades explican que la capacidad para dialogar es la característica principal de esta administración y que lo hacen con todos los sectores, "pero lo hemos hecho todavía más con los representantes del sector salud".
"El acceso de los representantes del Colegio Médico Dominicano al Palacio Nacional ha sido permanente. Precisamente ayer martes 26 de julio fue la más reciente reunión entre Senén Caba, presidente del CMD; Daniel Rivera, ministro de Salud Pública; Mario Lama, director ejecutivo del Servicio Nacional de Salud y, Raquel Peña, vicepresidenta de la República", explica el documento.
Sin embargo, la respuesta del CMD no se hizo esperar. Respondió a la publicación del comunicado en Twitter, y posteriormente envió un comunicado negando la reunión con la vicepresidenta y el director del Servicio Nacional de Salud.
A través de su cuenta en la red social Twitter (@cmdorg), el gremio aseguró que la única visita que recibieron fue la del ministro de Salud Pública, Daniel Rivera y "fue para tratar otros temas".
“Desmentimos categóricamente haber sostenido reunión con Mario Lama, Raquel Peña, solo el ministro de Salud Pública visitó la sede del Colegio Médico Dominicano y no hubo ningún acuerdo. Se socializaron sobre otros temas. Apostamos al diálogo, pero real”, dijo el CMD.
Para presidente del gremio, Senén Caba, ese comunicado de la administración del presidente Luis Abinader "está cargado de mentiras e incoherencias y que solo “intenta justificar el brutal e incalificable atropello de que fue objeto una marcha cívica y pacífica (debidamente notificada al Ministerio de Interior y Policía)”.