El exprocurador general de la República Jean Alain Rodríguez consideró que es un preso político en una carta enviada a la redacción de Diario Libre en la que informa sobre la publicación de las memorias del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario y el proyecto de La Nueva Victoria, proyecto por el cual se le acusa de corrupción y guarda prisión preventiva.
“Desde el momento que asumí el compromiso como Procurador General de la República, nos enfrentamos a un sistema penitenciario estancado y de reconocidas carencias, con una inminente necesidad de renovarse y reestructurarse, con cerca de diez años desde su último recinto penitenciario construido, con un inhumano hacinamiento y déficit de más de 12,000 espacios”,dice la carta.
Explica que la memoria, que puede ser descargada del portal web del Plan de Humanización, registra el antes y el después de este proceso; el avance social que trae consigo y los logros alcanzados de cara al gran proyecto concebido e implementado a partir del año 2016.
Dice que, dada su actual situación, reafirma que la visión de impulsar una política de transformación a través del Plan de Humanización del Sistema Penitenciario era la correcta.
“No lo vea como una obra de una gestión particular, sino como el pago de deuda atrasada, de la cual todos nos avergonzamos por las condiciones infrahumanas en las que viven aún muchos de nuestros privados de libertad, no solo por sus condiciones de hacinamiento, sino también por la falta de esperanza de una posible rehabilitación y reinserción social”, agrega el documento.
En la carta Jean Alain Rodríguez considera: “La impronta del Plan de Humanización, vista en sentido material con estos nuevos recintos penitenciarios que fueron entregados junto a aquellos que esperan ser puestos en operación, ha de ser conocida, abrazada y replicada generacionalmente por todas las gestiones de gobierno, perfeccionando, continuando y aportando a este proyecto de nación, ya que no se circunscribe a meras obras de ingeniería, con más de 12,000 nuevos espacios, sino que además, enmarca una visión de progreso, con reales programas de reinserción a partir de más y mejores oportunidades para los privados de libertad; presentando hoy la resolución de una problemática que por más de siete décadas había afectado a la sociedad dominicana; promoviendo la protección de derechos; garantizando la reeducación y efectiva reinserción de los internos, todo lo cual se traduce en menores índices de reincidencia, y por ende, un ataque directo a la criminalidad”.