Haití.- El primer ministro de Haití, Garry Conille, envió un mensaje a la nación luego que tres policías de antipandillas fallecieran en una emboscada este domingo.
Conille expresó que es una gran tristeza y que es una ataque directo a la seguridad y estabilidad de la nación haitiana.
Expresó que el Estado debe apoyar a las familias de los fallecidos y no abandonar a los más pequeños.
Sostuvo que estos quedarán en la memoria del pueblo como hombres que trabajaron con dedicación y sacrificio para proteger su comunidad.
Afirmó su compromiso para luchar contra la violencia y la impunidad.
“El que cometió este crimen que se detenga. Serán arrestados y juzgados”, exclamó y dijo que está en toda disposición para buscar a cualquier bandido de los que haya cometido este crimen atroz.
Se comprometió a cuidar tanto a los ciudadanos como a los extranjeros que viven en Haití.
Dijo que es tiempo de construir una nueva sociedad de paz y justicia. “La paz debe volver a Haití.
