Después de varios meses de especulaciones, esta semana se hizo público que la cantante y actriz Jennifer López solicitó oficialmente el divorcio de Ben Affleck, el 20 de agosto, coincidiendo con el segundo aniversario de su boda en Georgia. Según reporta el Daily Mail, la elección de esta fecha por parte de López no fue casual.
Una fuente cercana a la artista reveló que Jennifer estaba cansada de las supuestas humillaciones por parte de Ben y decidió presentar la solicitud de divorcio en su aniversario para causar mayor impacto. Sin embargo, según la misma fuente, Affleck ya había superado la relación, lo que hizo que el intento de López por herirlo emocionalmente no tuviera el efecto deseado.
Otra fuente comentó a US Weekly que el momento del divorcio fue especialmente difícil para Ben, aunque en el fondo ambos sabían que su relación había llegado a su fin mucho antes. En los documentos judiciales, López renunció a su derecho a recibir manutención conyugal y pidió al juez que se negara también a Affleck cualquier derecho a dicha manutención. Además, solicitó eliminar el apellido “Affleck” de su nombre.
TMZ informó que la pareja no contaba con un acuerdo prenupcial, lo que podría complicar la división de bienes. La separación comenzó a hacerse evidente cuando López asistió sola a la Met Gala en mayo de 2024, un evento al que tradicionalmente habrían acudido juntos.
Tras la separación, Affleck se mudó de la mansión conyugal a una casa de alquiler y posteriormente adquirió una nueva propiedad, poniendo en venta la residencia que compartían. La ruptura marca el final de un romance que, tras haberse iniciado en 2002, se reavivó dos décadas después, culminando en una boda en Las Vegas en julio de 2022, seguida por una ceremonia más grande en Georgia.