El ingeniero civil Norberto José Rojas Mercedes, profesor e investigador del Instituto Técnico Tecnológico de Santo Domingo (INTEC), explicó una serie de hipótesis técnicas sobre el reciente colapso del techo de la discoteca Jet Set, que ha dejado 66 muertos y 155 trasladados.
“Todo lo que vamos a hablar aquí son posibles hipótesis que deben ser validadas a través de un estudio forense para poder determinar cuál fue la real causa que provocó el colapso”, dijo el ingeniero Rojas.
Uno de los elementos mencionados fue la presencia de materiales adicionales sobre la estructura. “Se puede ver, por ejemplo, en algunos casos que tienen una gran cantidad de finos… unas 4 o 5 capas, eso representa un gran peso sobre esa estructura.”
Durante su participación en el programa Esto No Tiene Nombre, el experto también hizo referencia al tipo de materiales usados en la estructura del techo. “El techo aparentaba ser, tenía una alucín con vigas metálicas que posiblemente no aguantaron el peso, primero quizás de esta sobrecarga que se le puso por la gran cantidad de finos… y a su vez por esos equipos para poder enfriar los chiller, esos que tienen unos pesos muy grandes, y encima de eso quizás también los equipos de sonido que muchas veces van colgados de los propios techos.”
Rojas señaló que el siniestro ocurrido en 2003 pudo haber influido en este desplome trágico. “Esto fue en el 2003, que hubo un incendio que posiblemente pudo haber afectado la estructura.”
Además, indicó que “días previos entró [una persona] y había como una filtración”, lo que podría indicar deterioro progresivo.
En cuanto al tipo de falla, indicó: “Fue un colapso completamente por carga vertical… esta falla pudo haber venido originándose poco a poco, de manera paulatina, hasta que cede a un lado y luego viene una reacción en cadena.”
Sobre la colocación de cargas adicionales con el tiempo, afirmó: “Si se diseñó de esa forma y luego posterior le fueron agregando pesos sin consultarlo con un estudio estructural… eso tiene que hacerse… un ingeniero estructural [debe] determinar si realmente la estructura puede ser capaz de soportar.”
El ingeniero también explicó el posible impacto de las vibraciones por sonido y equipos, al destacar que “una cosa es, por ejemplo, que el alto sonido puede provocar vibraciones a la estructura… si esa coincide en la forma en que vibra el techo, pues te puede provocar que la estructura comience a tener ciclos de movimientos… puede provocar que la estructura colapse por lo que se llama, es un efecto que se llama resonancia.”
Agregó que, en casos como estos, “es posible que una soldadura de esa… pueda verse sometida a una gran cantidad de subes y bajas, subes y bajas todos los días, y eso poco a poco pudo haber debilitado.”
Con relación al proceso de evaluación de las causas, Rojas indicó que “ya se hizo un primer levantamiento con drones… posteriormente entonces evaluar, poder revisar los refuerzos que tenía, poder tomar mediciones… eso pudiera tomar, digamos, una semana como mucho.”
Respecto a la supervisión estructural en el país, explicó que “no hay un mecanismo que exija a los dueños que evalúen esas estructuras”, aunque aclaró que “cada dueño tiene que ser responsable.”
Señaló que cualquier cambio de uso en una edificación debe ser evaluado técnicamente: “Todo cambio… tiene que ser evaluado por un ingeniero estructural… a veces dos pesos menos pueden significar una tragedia.”