Con 19 años, Suleman Dawood era el pasajero más joven del malogrado sumergible Titán y quien había expresado sus dudas acerca de realizar el viaje que tenía como destino explorar el naufragio de Titanic a unos 3,800 metros bajo el océano Atlántico frente a la costa de Terranova, Canadá.
La hermana mayor de su padre, el empresario pakistaní Shahzada Dawood y que también viajaba en la nave, habló con NBC News y aseguró que el estudiante universitario había dicho a otro familiar que "no estaba preparado" y que se sentía "aterrorizado" por el viaje hacia los restos del naufragio más famoso.
Pero Suleman terminó en el sumergible de 22 pies de OceanGate, ya que el viaje coincidió con el fin de semana del Día del Padre y estaba ansioso por complacer a su progenitor, quien, según dijo su tía al medio estadounidense, era un apasionado de la historia del Titanic, embarcación que se hundió durante su viaje inaugural de Inglaterra a Estados Unidos en 1912.
"Estoy pensando en Suleman, que tiene 19 años, ahí adentro, tal vez sin aliento… Ha sido paralizante, para ser honesto", dijo Azmeh Dawood la hermana mayor del empresario durante una entrevista telefónica desde su casa en Ámsterdam.
El medio asegura que la mujer estaba devastada tras OceanGate, la compañía detrás de la expedición, dar a conocer el deceso de los cinco pasajeros y que la Guardia Costera de EE. UU. informara que los escombros hallados en el área de búsqueda eran consistentes a una "implosión catastrófica", lo que eliminaba la esperanza de encontrar con vida a los tripulantes, dos de los cuales eran sus familiares.
"Siento incredulidad. Es una situación irreal", expresó.
La mujer le contó al medio que los últimos cuatro días fueron angustiosos y que se mantuvo pegada a la cobertura de la búsqueda del sumergible, desesperada por información sobre su hermano y su sobrino y temiendo lo peor.
"Siento que me han atrapado en una película realmente mala, con una cuenta regresiva, pero no sabías para qué estabas contando", dijo. "Personalmente me ha resultado un poco difícil respirar pensando en ellos".
Los hermanos Dawood son descendientes de una de las dinastías corporativas más prominentes de Pakistán. El imperio empresarial de la familia tiene inversiones en agricultura, el sector de la salud y otras industrias.
Shahzada fue vicepresidente de Engro Corporation, con sede en Karachi, y asesor de Prince’s Trust International, una organización benéfica fundada por el rey Carlos III.
Los hermanos habían dejado de estar en contacto en los últimos años, ya que Azmeh fue diagnosticada con esclerosis múltiple progresiva primaria en 2014 y tuvo que ser "reducida a estar en una silla de ruedas". Decidió mudarse de Inglaterra a Ámsterdam para tener un acceso más fácil al cannabis medicinal, lo que la familia desaprobó y comenzaron a hablar con menos frecuencia.
En un comunicado, los padres de Azmeh y Shahzada pidieron a las personas que "mantengan en sus oraciones a las almas de los difuntos y a nuestra familia", al tiempo que agradecieron a los equipos de búsqueda por sus "esfuerzos incansables".
"El inmenso amor y apoyo que recibimos continúa ayudándonos a soportar esta pérdida inimaginable", dijeron Hussain y Kulsum Dawood, los patriarcas de la dinastía pakistaní.
La obsesión con el Titanic
La mujer recordó que su hermano estaba "absolutamente obsesionado" con el Titanic desde muy joven, durante la entrevista recordó que cuando eran niños y todavía vivían en Pakistán, miraban constantemente la película de 1958 "A Night to Remember", un drama británico sobre el hundimiento del trasatlántico.
Incluso, cuando el empresario conoció a su esposo le preguntó si podían ver un documental de cuatro horas sobre el Titanic, además, le encantaba ver exposiciones en museos con artefactos recuperados de los restos.
Por lo que no se sorprendió cuando se enteró que su hermano había comprado boletos para la expedición del Titán, algo que ella jamás haría: "Si me hubieras dado un millón de dólares", dijo, "no habría subido al Titán".